Tras la ruptura de la pareja y habiéndose decidido con cuál de los progenitores van a vivir los hijos, se hace fundamental que aquel que no viva con ellas, aporte a los gastos del día a día con una cantidad que se acordará de mutuo acuerdo o por el juez, para facilitar la manutención de los hijos.
Son varios los factores que se tienen en cuenta para decidir cuál debe ser dicha cantidad, que los trabajaremos aquí.